Galilea Montijo es endeble y los malos comentarios de la prensa la hacen sufrir. Ella se considera una persona polémica, pero prefiere evitar los escándalos, aunque siempre la persiguen.
Casi todos los fines de semana ‘la casan’, la han anunciado en videos ‘porno’, le han dicho bailarina exótica y hasta le han inventado embarazos, así que se dispuso a diseñar un manual para evitar los rumores, pero ‘nomás’ no le sale.
“Eso es algo que no está en tus manos, me quedó clarísimo no volver a salir con ellos (los futbolistas). Ahora escándalo es cualquier cosa, depende de cómo lo manejen, porque hasta un video que no eres tú da de qué hablar, no sé cómo evitarlo o alejarme de él”.
La gente que la conoce sabe que es más divertida en su vida privada que en la televisión, y que su personalidad está muy alejada del clásico baile ‘colofox’, que hacía en Vida TV.
“Mis amigos y mi familia saben que soy peor que en la televisión, porque aquí tengo que contenerme y eso lo he tratado de entender, he tratado de reservarme muchas cosas de mi vida personal, porque he aprendiendo con los fregadazos y el público entiende que me han malinterpretado muchas entrevistas”.
Desde que salió del reality show Big Brother, su vida cambió: ganó y helicópteros sobrevolaban su casa para descubrir una posible boda todos los fines de semana.
“Ya no tenía vida, de hecho lo sigo pensando, me daba miedo salir a la calle” por temor a que alguien la retrate, agregó.
Galilea es soñadora. Desde que era pequeña se veía como Miss Universo; cuando en su casa sintonizaban las telenovelas se imaginaba como la protagonista de la historia:
“Yo les pedía a mis primos que ellos fueran las misses, aunque fueran niños; soñaba con ser diseñadora de moda, mi mamá tenía una máquina de coser y yo deshacía mi ropa”, platicó Galilea.
Uno de los sueños que aún le falta realizar en su vida es casarse y tener una familia.
“Ser mamá, lo vengo diciendo desde hace rato, pero no más no encuentro con quién. Formar una familia es mi sueño”.
“Es que yo no pongo de mi parte, pero este año me propuse soltarme y salir con mis amigas, presiento que anda por ahí cerca (el amor)”.
La conductora cuenta que estudió para ser estilista profesional, pero después lo dejó porque le dieron la oportunidad como modelo a los 14 años de edad, su primer paso para entrar a la televisión.
El panorama se abrió cuando conoció a los maestros de actuación Sergio Jiménez y Adriana Barraza, sus iniciadores en el mundo de la actuación.
Había hecho conducciones musicales, pero el productor Emilio Larrosa (Muchachitas) le dio su primera oportunidad en la telenovela Tú y yo, con el personaje de ‘Resignación’.
Después vinieron Tres mujeres, El precio de tu amor y La verdad oculta.
“Hasta que dije que lo mío era la conducción”.
Por ahora, señala Galilea, “vivo en mi burbuja color rosa” y comprende que su participación en programas como Hoy le ayudarán a estar más cerca del público.
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